En ocasiones, la pasión por el fútbol es llevada a tal extremo que puede ser considerada incluso una religión. El fútbol y su fanatismo conjugan un deporte lleno de costumbres y creencias.
Entre las que se encuentran las famosas cábalas, que se refiere a un estudio en busca de la verdad en lo oculto, mediante rituales. Por ejemplo, algunas cábalas en el fútbol ocurren cuando un jugador entra a la cancha con las medias abajo o decide entrar con el pie derecho porque “es de buena suerte”.
La religión del fútbol es tanto de los futbolistas como de los hinchas que ven a los jugadores como profetas del mensaje que más conocen: el gol.
Pocos jugadores han provocado este sentimiento en sus equipos y menos en un país entero. Maradona es uno de los pocos futbolistas que se coloca en un escalón privilegiado cuando tratamos estos temas.
Para ver la realidad de lo que fue Maradona en Argentina, basta con ver la película “ El camino de San Diego”, que trata la historia de “Tati”, un humilde padre de familia que tiene una pasión desaforada por su ídolo Maradona.
La historia está ambientada en el año 2004, momento en el que Maradona es internado en un hospital de Buenos Aires por problemas cardíacos.“Tati” trabaja recolectando madera y encuentra un pieza que él asemeja con su ídolo, por lo que decide viajar hasta Buenos Aires para conocerlo y entregarle la pieza de madera.
Si volvemos a compararlo con la religión y teniendo en cuenta que realizó el viaje por devoción, podríamos decir que realizó una peregrinación.
Año de estreno: 2006
Director: Carlos Sorin